1. ¿QUÉ ES LA TEORÍA DE LAS EMOCIONES CONSTRUIDAS?
La teoría de la emoción construida es una perspectiva relativamente nueva en el campo de la psicología de la emoción que sugiere que las emociones no son entidades estáticas y universales, , sino más bien construcciones mentales dinámicas que resultan de la interacción compleja entre diferentes factores cognitivos, sociales y fisiológicos. Según esta teoría, las emociones no son innatas o determinadas biológicamente, sino que son creadas y reguladas por los individuos mismos– a través de un proceso de construcción que implica la asignación de significados a eventos o experiencias sensoriales específicas.
Un poco de historia
Los fundamentos teóricos de la teoría de la emoción construida se remontan a principios de los años noventa, Cuando Lisa Feldman Barrett y sus colegas comenzaron a cuestionar las suposiciones tradicionales de la psicología emocional, según las cuales las emociones son entidades discretas y universales que se desencadenan por estímulos específicos. En cambio, Barrett propuso que las emociones son construcciones que surgen de la interacción entre procesos cognitivos, sociales y fisiológicos complejos, todos los cuales están influenciados por la cultura, experiencias de vida y contextos sociales.
La teoría de la emoción construida sugiere que las emociones no están determinadas por patrones específicos de respuesta fisiológica, como la aceleración cardíaca o la transpiración, , sino más bien por patrones de pensamiento que interpretan estas respuestas como significativas en un contexto dado. Por ejemplo, la aceleración cardíaca puede interpretarse como relacionada con el miedo en algunas situaciones, pero también puede relacionarse con la excitación en otras.
2. ¿ QUÉ PROPONE LA TEORÍA DE LA EMOCIÓN CONSTRUIDA ?
Según esta teoría, las emociones no son innatas, sino que están construidas por los individuos a través de un complejo proceso de regulación emocional que implica la asignación de significados a estímulos o experiencias específicas. Este proceso implica una evaluación cognitiva de los estímulos, que consiste en interpretarlos según los conocimientos previos, las creencias y las expectativas del individuo. Por ejemplo, una persona que tiene creencias negativas sobre sí misma puede interpretar la crítica constructiva como un ataque personal, lo cual puede desencadenar emociones negativas como la ira o la tristeza.
Además, la teoría de la emoción construida sugiere que las emociones están reguladas por procesos cognitivos como la atención, la memoria y el juicio.
Por ejemplo, una persona puede regular sus emociones centrándose en los aspectos positivos de una situación en lugar de los negativos, o recordando experiencias positivas para fortalecer un estado emocional positivo.
La teoría de las emociones construidas subraya que las emociones no son solo construcciones individuales, sino que también están influenciadas por los contextos sociales en los que se producen. Por ejemplo, las normas culturales y las expectativas sociales pueden afectar la forma en que las personas interpretan y expresan sus emociones. En algunas culturas, la expresión abierta de la ira puede considerarse inadecuada, mientras que en otras culturas puede considerarse una forma aceptable de expresión emocional.
De igual manera, los roles sociales y las relaciones interpersonales pueden influir en la construcción y regulación de las emociones. Por ejemplo, una persona puede regular sus emociones de manera diferente según su estatus social o su relación con otra persona. Las emociones también pueden ser utilizadas para mantener o modificar relaciones interpersonales, como cuando una persona usa la adulación para mejorar sus relaciones con otra persona.
3. ¿QUÉ APORTA ESTA TEORÍA A LA COMPRENSIÓN DE LAS EMOCIONES?
La teoría de las emociones construidas sugiere que los contextos físicos también pueden influir en la construcción y regulación de las emociones. Por ejemplo, la temperatura, la iluminación y el ruido pueden afectar los estados emocionales de las personas. Los estudios han demostrado que las personas pueden sentirse más ansiosas en entornos ruidosos y congestionados, mientras que los entornos tranquilos y pacíficos pueden inducir estados emocionales más relajados y positivos.
Otra característica importante de la teoría de la emoción construida es que reconoce que las emociones no son respuestas automáticas a los estímulos, pero que son construidas a través de un proceso de construcción que puede implicar variaciones individuales importantes. Según esta teoría, las personas pueden tener diferencias en la forma de construir y regular sus emociones en función de su historia, personalidad y entorno social.
Por ejemplo, algunas personas pueden ser más propensas a la ansiedad debido a su historia de vida o temperamento, mientras que otras pueden ser más resistentes a los eventos estresantes debido a su capacidad para regular sus emociones de manera efectiva.
Por último, la teoría de la emoción construida tiene implicaciones importantes para la práctica clínica, ya que sugiere que los trastornos emocionales pueden ser mejor comprendidos y tratados mediante el examen de los procesos cognitivos y sociales que subSu construcción y regulación. Las intervenciones clínicas pueden, por tanto, diseñarse para ayudar a los pacientes a identificar y cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento que contribuyen a la construcción y regulación de sus emociones.
En resumen, la teoría de la emoción construida representa un avance importante en la comprensión de las emociones como procesos dinámicos y socialmente construidos más que como entidades estáticas y universales. Esta teoría ofrece una perspectiva rica y matizada sobre la naturaleza de las emociones, que puede ayudar a comprender mejor su papel en la vida cotidiana y su relevancia para la salud mental.
4. PARA RESUMIR
Según la teoría de la emoción construida, las emociones no son innatas, sino que son construidas por los individuos a través de un complejo proceso de regulación emocional que implica la asignación de significados a estímulos o experiencias específicas. Este proceso implica una evaluación cognitiva de los estímulos, que consiste en interpretarlos en función :
Creencias, conocimientos y expectativas
Por ejemplo, una persona que tiene creencias negativas sobre sí misma puede interpretar la crítica constructiva como un ataque personal, lo cual puede desencadenar emociones negativas como la ira o la tristeza.
De la atención, la memoria y el juicio
Una persona puede regular sus emociones centrándose en los aspectos positivos de una situación en lugar de los negativos, o recordando experiencias positivas para fortalecer un estado emocional positivo.
Contexto social (normas culturales y expectativas sociales)
En algunas culturas, la expresión abierta de la ira puede considerarse inadecuada, mientras que en otras culturas se considera una forma aceptable de expresión emocional.
Roles sociales, relaciones interpersonales
Por ejemplo, cuando una persona usa la adulación para mejorar sus relaciones con otra persona.
Contextos físicos (tiempo, iluminación, ruidos)
Las personas pueden sentirse más ansiosas en entornos ruidosos y congestionados, mientras que los entornos tranquilos y pacíficos pueden inducir estados emocionales más relajados y positivos.
Antecedentes y personalidad
Por ejemplo, algunas personas pueden ser más propensas a la ansiedad debido a su historia de vida o temperamento, mientras que otras pueden ser más resistentes a los eventos estresantes debido a su capacidad para regular sus emociones de manera efectiva.